Oriol Pujol renunciará oficialmente este martes a su acta de diputado del Parlamento de Catalunya, decisión que anunció este lunes junto con su dimisión como secretario general de Convergència Democràtica.
El adiós de Pujol se produce un año y medio después de que fuera imputado en el caso ITV por tráfico de influencias, motivo por el cual, desde entonces (marzo del 2013), había delegado sus funciones como secretario general de CDC sin haber dimitido de ese cargo. Posteriormente, en 2014, fue imputado también por cohecho. Hace sólo dos semanas, la Agencia Tributaria informaba que su esposa, Anna Vidal, había encubierto el pago de comisiones a su marido durante al menos cinco años.
Pujol, según su escrito de renuncia, parece querer esconderse para no estropear la consulta del 9-N, la Diada del 11 de septiembre y las próximas elecciones municipales, en mayo de 2015. «Voy dejándolo todo para no perjudicar en nada», remata. Una vez fuera del Parlamento, perderá su condición de aforado. Será sustituido por Assumpció Laïlla.
Reforzar la dirección
A partir de ahora se abre una etapa de cambios en la estructura de Convergència. La ejecutiva del partido, reunida este lunes, pretende reforzar la dirección para encarar un retorno de vacaciones que se prevé políticamente muy caliente. Josep Rull, sustituto de Oriol Pujol como secretario general hasta el Consejo Nacional ordinario de la formación, previsto para el 6 de septiembre, ha anunciado que no se tratará sólo de un cambio de un nombre, sino que esta renuncia dará lugar a modificaciones estructurales que supondrán una solución «estable y duradera» hasta el próximo congreso de CDC, que se celebrará en 2016.
