Las accionas semanales reivindicativas de la plataforma Stop Pujades o la aparición de asociaciones de llamamiento a la desobediencia, son consecuencias directas de las subidas exageradas y continuadas de los precios de los transportes metropolitanos de Barcelona. Varias organizaciones reivindicativas han aparecido con fuerza en el ámbito social últimamente. La plataforma Stop Pujades, que reclama la retirada del aumento de 2014 y la congelación del precio del transporte público de acuerdo con las tarifas de 2013, y la Red Memetro, una asociación de ayuda al uso gratuito del transporte metropolitano, son dos ejemplos destacados.
El caso de Memetro nace en 2011 con el propósito de ayudar y dar cobertura económica a aquellos que «se olvidan» de pagar el billete de metro. Es lo que denominan «trastorno Memetro».
A través del pago de una cuota mensual de siete euros, los asociados crean un fondo común que sirve para pagar las multas de los usuarios que las reciben. Pero para poder hacer frente a las multas in situ, es decir, con la correspondiente reducción del importe, se pide a los socios que lleven siempre encima la acreditación oficial de la asociación y cincuenta euros, que es el precio de la multa con descuento si se paga en el mismo momento.
La asociación también se nutre de las aportaciones voluntarias de los socios, de venta de merchandising o de campañas de financiación externa que se utilizan directamente para pagar las multas que imponen los revisores de la red de transportes. Asimismo, desde la asociación se ha creado una aplicación móvil, una página en Facebook y una cuenta de Twitter para ayudar a los usuarios a intercomunicarse y compartir información en tiempo real y sobre plano sobre los puntos donde hay revisores y de donde hay situados controles de la policía. Los usuarios son a la vez informadores e informantes.
Pero Memetro también es una asociación cultural dedicada al arte digital, a las nuevas tecnologías y al pensamiento crítico, como también a las sociedades conectadas en red. Sin esta premisa no hubiera surgido la asociación ni su «trastorno», la base de su existencia. A través de su manifiesto, que ya tiene mes de 1000 afiliados, o de su Facebook, que tiene mes de 11.000, informan de sus eventos culturales, campañas de difusión y sesiones educativas.
