Cuando el consejero de Presidencia, Francesc Homs, propuso al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que celebrara el pleno monográfico para dar explicaciones por el caso Palau el 31 de julio, en pleno periodo estival, no calculó los dos imprevistos que le han surgido a Convergència estos últimos días. Así lo ve el portavoz socialista, Maurici Lucena, quien se ha referido a la «fecha elegida con agosticidad» por «el estratega Homs».
Lucena ha destacado que a pesar de la «sagacidad» de «el estratega Homs» a la hora de escoger el 31 de julio, cuando la mayoría de la ciudadanía está de vacaciones y las redacciones de los medios de comunicación funcionan a medio gas, la comparecencia del presidente Mas «se ha envenenado» por el estallido del caso Bárcenas y por el informe emitido por el juez que estudia el desfalco del Palau de la Música.
El portavoz ha augurado que el Pleno «se envenenará como consecuencia de las analogías inevitables» por los dos casos de presunta corrupción.
«Si las cosas se hubieran hecho bien, tendría que haber comparecido antes del verano, seguro que el estratega también preferiría haberlo cambiado», ha considerado el diputado, «para ahorrarse la implosión de los dos casos». Por lo que se refiere a las explicaciones que ha dado el portavoz del Gobierno, este mismo martes, Lucena se ha mostrado sorprendido con que «un licenciado en derecho», ha dicho en alusión a Homs, «ha puesto en pie de igualdad el informe del juez Pijuan y el emitido por el patronato de Palau, que exculpaba CDC.
