El Colegio de Periodistas de Catalunya (CPC) ha organizado una rueda de prensa para denunciar el «destrozo del tejido audiovisual catalán», que está sufriendo Catalunya, según ha asegurado el presidente del CPC, Josep Martí. En el acto han participado diferentes miembros del Comité de Empresa de TV3, que han explicado la reunión que mantuvieron el pasado jueves con el Consejero de Presidencia, Francesc Homs, a quien reprocharon el «desprestigio» al que les somete el Govern.
Montserrat Besses, del departamento de documentales de TV3, ha lamentado que los trabajadores se sientan continuamente desprestigiados porque desde el Govern se pide que ellos también deben hacer «sacrificios», cuando ya los están asumiendo -«nos quieren hacer pasar como un grupo de privilegiados o vagos» ha explicado Besses»-. También han criticado que miembros del Govern, como el Presidente Mas, hagan anuncios importantes en medios privados como 8TV, lo que «desprestigia» a los medios públicos.
«Introducir de forma gradual la producción externa»
Besses ha mostrado un documento oficial de la Generalitat en el que se define el objetivo de las televisiones públicas como «garantizar el tejido empresarial existente». Según Besses, en este documento se propone «introducir de forma gradual la producción externa», lo que supondría una disminución de la calidad del producto, que según Martí puede provocar que una pérdida de anunciantes que provocaría una reducción de los ingresos de la CCMA.
Ramon Espuny, presidente del Sindicato de Periodistas de Catalunya y miembro del Comité de Empresa de TV3, ha explicado que el presidente de la CCMA que ha propuesto el ERE, Brauli Duart, no ha participado en ninguna de las reuniones, a las que denuncian los trabajadores que no se ha producido ninguna negociación.
Según los representantes de los trabajadores de la CCMA, la consultora Price Waterhouse, responsable del ERE de Canal 9 -que está siendo investigado por la justicia y que supuso el despido de 1.100 trabajadores- y contratada por el Govern catalán para llevar a cabo una reducción del presupuesto de los medios públicos catalanes, se ha negado hasta ahora a mantener ninguna negociación y sólo ha hecho una contraoferta al despido de 312 de personas y una rebaja del 7% de los salarios, que pasaría por reducir los sueldos en un 12% para que el ERE sólo afecte a 156 trabajadores.
