Los principales sindicatos policiales españoles están indignados por la presencia de un agente de los Mossos d’Esquadra efectuando «tareas de inteligencia» por orden de sus superiores, según la explicación que le atribuyen, durante la concentración que ha tenido lugar este sábado en Madrid contra la sentencia del Tribunal Supremo que ha condenado a penas de cárcel a los asaltantes de la librería Blanquerna.
ABC, el diario que se refirió por primera vez a los hechos, recoge el punto de vista de varios portavoces sindicales, como Ramón Cosío, del Sindicato Unificado de Policía (SUP), según el cual este sería un caso de uso partidista de recursos públicos. Para José María Benito, de la Unión Federal de Policía (UFP), la actuación del agente al que pillaron, supuestamente, haciendo fotos a los asistentes y a los policías nacionales presentes en la concentración es «ilegal y una vergüenza» que «no tiene ninguna justificación».
El mismo diario publica la reacción de Antonio Labrado, de la Confederación Española de Policía (CEP), que considera que el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, tendría que pedir explicaciones a la Generalitat porque el agente habría estado haciendo tareas de recopilación de información que son competencia de la Guardia Civil y de la Policía Nacional.
Una actuación de los Mossos fuera de Cataluña sólo la podría admitir un juez y se tendría que comunicar a la Guardia Civil o a la Policía Nacional, cita la misma información. Los sindicatos policiales, eso sí, destacan la buena sintonía profesional que tienen con los Mossos y apuntan hacia el origen de las órdenes que reciben en un caso como este.
Por otro lado, la Policía Nacional, según explica Benito, del sindicato UFP, sabe desde hace tiempo que la Generalitat ha destinado un equipo de mossos a Madrid, hecho que indica que se ha permitido por cuestiones políticas.
