El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha afirmado este martes en una rueda de prensa que su objetivo es aprobar los próximos presupuestos con el apoyo de la CUP y de los comunes, a quienes se ha referido como «la izquierda nacional», y ha anunciado que las cuentas incluirán medidas «de choque» para mitigar los efectos de la inflación. El gobierno catalán se centrará en las alianzas con los partidos mencionados porque, según el presidente, «es lo que hará más coherente el presupuesto».
«Les he pedido la máxima implicación para aligerar el incremento del coste de la vida que noten los hogares y las empresas. Será uno de los ejes de los presupuestos», ha manifestado Aragonès, que ha considerado que «no puede ser que de cada crisis salgamos más desiguales» y que hace falta «redireccionar los recursos».
El líder del ejecutivo catalán ha definido como «clave» el próximo trimestre, pero ha insistido en la necesidad de abandonar los rifirrafes internos para abordar la resolución del conflicto político entre el Estado y el independentismo. «Para ganar se tiene que aparcar cualquier discurso derrotista. Dejemos atrás las batallitas del día a día«, ha indicado Aragonès, después de las últimas desavenencias con Junts a raíz de la suspensión de Laura Borràs como diputada y presidenta del Parlament.