El Gobierno de la Generalitat ha aprobado hoy la autorización para iniciar los trámites para convertir al Instituto Catalán de Finanzas (ICF) en un banco público, lo que permitirá que el ICF opere como entidad de crédito.
Este acuerdo es un trámite necesario dentro del procedimiento que está llevando a cabo el ICF para obtener la licencia bancaria, aunque, antes de que se cree la nueva sociedad, será necesario que los organismos reguladores españoles y europeos competentes, Banco de España y Banco Central Europeo, den el visto bueno al proyecto. La Junta de Gobierno del ICF lo aprobó este mes de julio y se presentará ante las autoridades europeas para operar como banco.
En el caso de que se obtengan las autorizaciones administrativas necesarias por parte de los organismos reguladores, el ICF constituirá esta nueva sociedad mercantil, de la que será el único accionista y a quien aportará su rama de actividad bancaria con la finalidad de obtener la licencia del Banco de España para poder operar como entidad de crédito.
Ficha bancaria
La ficha bancaria permitirá al ICF acceder a más fuentes de financiación, como los recursos del Banco Central Europeo, y canalizar determinadas ayudas restringidas a las entidades de crédito.
Esto facilitaría que el ICF profundice en el desarrollo de su misión como instrumento para impulsar el tejido empresarial y social de Cataluña, especialmente para aquellos proyectos y sectores considerados estratégicos, como la vivienda social, la transición verde o la industria.
La consejera portavoz, Silvia Paneque, ha señalado que la constitución del ICF como banco forma parte de los acuerdos de investidura con ERC. Además de otorgar financiación a proyectos empresariales, sobre todo a las pequeñas y medianas empresas, también podrá financiar personas físicas, básicamente en el acceso a la vivienda.
