Las entidades ecologistas se han manifestado este sábado en Barcelona para pedir que se puedan regar los espacios verdes comunitarios a pesar de las restricciones por la sequía. Un centenar de entidades y huertos urbanos de la ciudad han presentado la convocatoria ‘¡Salvemos las plantas! El agua es vida’, que apuesta por seguir regando huertos y espacios verdes de los barrios sin utilizar agua potable y adaptándose a la sequía.
Convocados por la red de entidades Ruralitzem-Veus, la plataforma Salvem el Parc Joan Miró y Consell de Cent Verd i Viu, unas 200 personas, según la Guardia Urbana, han realizado una marcha por la calle Consell de Cent y han reclamado al Ayuntamiento que proporcione aguas subterráneas y brinde apoyo con las herramientas necesarias para realizar un riego y cultivo adecuados.
Las entidades se comprometen a no utilizar agua de la red para regar sus espacios verdes, pero al mismo tiempo se niegan a dejar morir las plantas y la biodiversidad. Por ello, la convocatoria también especifica el compromiso de utilizar agua de lluvia y crear estructuras para acumular esta agua como forma de regar los huertos urbanos de la capital catalana.
Los huertos urbanos también se comprometen a utilizar técnicas agrícolas adaptadas a la escasez de agua, como el riego por goteo, el riego de implantación, la selección de variedades de plantas adaptadas a la sequía y la creación de cobertura de suelo de materia orgánica para preservar la humedad.
Según estas mismas entidades, el verde urbano en la ciudad de Barcelona solo representa el 11% de la superficie de la ciudad. Un porcentaje que se reduce hasta el 9% si no se cuenta la sierra de Collserola, situando a la capital catalana muy lejos de las recomendaciones del 30% de la Organización Mundial de la Salud (OMS).