El juez instructor del caso Negreira, de supuesta corrupción arbitral, ha rechazado que el FC Barcelona se persone como acusación particular en un auto cuyo contenido ha difundido Europa Press este martes.
En él, además, atribuye a Joan Laporta, el actual presidente azulgrana, «actos idénticos» a los que se imputan a los expresidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, investigados en este caso, en referencia a los pagos al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros José María Enríquez Negreira.
La resolución considera «contrario a toda ética» que «quien cometió unos actos idénticos a los de los posteriores presidentes pretenda personarse en la causa ejerciendo la acusación particular bajo el instrumento jurídico del FC Barcelona, como si éste fuera una entidad abstracta con un yo propio ajeno al de los directivos del club».
El instructor del caso ha rechazado el recurso presentado por el club azulgrana contra la resolución del pasado 26 de junio, que ya había desestimado a la personación como acusación, indicando también que «no es admisible éticamente que Laporta acuse a los presidentes Rosell y Bartomeu» por el delito de administración desleal «cuando existen indicios más que sobrados de que Laporta cometió los mismos hechos que los presidentes posteriores».
A diferencia de Rosell y Bartomeu, Laporta no afronta acusación alguna en este caso porque el delito presuntamente cometido con los hechos que le atribuyen en el caso Negreira, correspondientes a su primera etapa como presidente, ya habría prescrito.
