El presentador del programa Està Passant de TV3, Toni Soler, ha atribuido la polémica del gag de la Virgen del Rocío al período electoral. A comienzos de la edición de este martes, Soler destacó que algunos de los que expresaron quejas fueron el presidente de la Junta de Andalucía, el popular Juanma Moreno o el presidente de Aragón, el socialista Javier Lambán. Lejos de disculparse, Soler les ha exigido disculpas a ellos, en especial a Moreno, que acusó al programa de despreciar a los andaluces. «Es mentira, es irresponsable y es demagógico», ha aseverado.
Tras defender la valía de la humorista Judit Martín que hacía de virgen en el gag, Soler se ha mostrado muy sorprendido del «alcance» de la polémica, ironizando que estos días en España se ha hablado más de eso que de la victoria del Real Madrid contra el Barça. «El gag tal vez era malo, pero ¿y el partido de Lewandowski?», se lamentó Soler. Asimismo, ha abierto un capítulo de disculpas en el que las ha exigido a Moreno por las acusaciones de desprecio a los andaluces ya los políticos «de aquí y de allá» que han «aprovechado para recoger votos, dos en el caso de Ciudadanos».
También ha exigido disculpas a la «prensa española» a la que ha acusado de intimidar a su equipo. «Eso es cosa mía», ha declarado. Y también ha exigido disculpas a los obispos catalanes «para preocuparse más del humor de TV3 que de la pederastia». Por último, advirtió a la Fundación Española de Abogados Cristianos, que presentó una demanda contra el programa, que «si hay juicio, citaremos a la Virgen del Rocío como testigo de la defensa».
