Queda claro que el expresidente de la Generalitat, Quim Torra (Junts) no sabe estar callado. Dicen que un expresidente debe ser discreto. El expresidente español Felipe González lo describía bien: los expresidentes “son valiosos como los jarrones chinos, pero nadie sabe dónde ponerlos”. Pues, parece que Torra ha decidido ejercer de jarrón chino, y va poniendo la zancadilla a su sucesor en el cargo, en este caso, Pere Aragonès (ERC).
En el último tuit, el expresidente Torra acusa a Aragonès de cínico y lo hace en un tema tan delicado como el del accidente del tren en Moncada. Torra, tras escuchar las críticas hechas por Aragonès al gobierno español, ha escrito: “Con los presupuestos españoles aprobados estos años -y el último hace una semana-, que quien los aprobó se queje del desastre de Cercanías es de un cinismo monumental”.
Para terminar de remacharlo, el expresidente ha insistido en un tuit que publicó el pasado 9 de septiembre: “Cuando votas los presupuestos del gobierno que sea te haces responsable de las inversiones o no que están incluidas. Si Cercanías es un desastre, son también responsables aquellos partidos catalanes que en Madrid han apoyado al gobierno español de turno. Ya está bien de excusas”.