El concejal de Ciutat Vella, Jordi Rabassa, cree que es necesario revisar de forma inmediata el régimen sancionador de la normativa de terrazas. Reconoce que de forma mayoritaria los restauradores no respetan el número de mesas y sillas que tienen fijadas en la licencia, lo que multiplica el trabajo inspector. «Eso supone un gasto en recursos humanos para el Ayuntamiento y en el distrito que ya está siendo inasumible», critica. «No puede ser que tengamos que poner tantas multas», dice el concejal.
Rabassa reconoce que existen algunos casos que son «muy frustrantes» para la administración local. «Firmo constantemente multas al mismo restaurador», asegura. Ante esto, considera que una solución es que el Ayuntamiento pueda sacar la licencia de terraza a «aquel que incumple de forma reiterada».
El concejal recuerda que el Ayuntamiento está ordenando las licencias de terrazas que se otorgaron durante la pandemia y que también se están reduciendo los horarios en aquellos puntos más conflictivos. Rabassa también ha aprovechado para realizar un llamamiento a la «responsabilidad» del sector. «Queremos restauradores que cuiden las calles y las plazas», sentencia.
