En el segundo día de fuegos simultáneos en Cataluña, la estimación provisional de las hectáreas afectadas en cuanto a incendios activos son de 1.470 hectáreas en Artesa de Segre y 43,83 en Lladurs, y en cuanto a fuegos estabilidades es de 398 a Corbera d’Ebre, 330 en Castellar de la Ribera y 21 en Sallent. Todo ello, según datos aproximados de los Agentes Rurales.
Las temperaturas han sobrepasado los 40 grados en algunos puntos del país y el riesgo de incendio forestal es extremo. Existe además riesgo de tormentas secas.
El incendio de Artesa de Segre, en la Noguera, es el que más preocupa ahora mismo a los bomberos. El fuego sigue activo, con dos flancos que evolucionan de forma distinta: el que más preocupa es el del oeste, porque tiene un potencial de quema de 8.000 hectáreas.
Lo que más hace sufrir a los Bomberos son dos lenguas de fuego de 1,8 y 1,4 kilómetros respectivamente que bajan desde debajo de la parte alta de Sant Mamet hacia la Vall de Ariet. Estas lenguas de fuego se encuentran a 500 metros de una franja labrada, que se confía en que actúe como cortafuegos y que sirva para contener el avance de las llamas.
En el Solsonès, el incendio de Lladurs, que no alcanza las 50 hectáreas quemadas, tiene un potencial de quema de 50.000 hectáreas. El fuego afecta a una zona de muy difícil acceso y muy boscosa. Los Bomberos confían en dar por estabilizado este incendio a última hora de este viernes.
A primera hora de la tarde se inició un nuevo incendio de vegetación forestal en Altès, en el término municipal de Bassella, en el Alt Urgell. Los bomberos trabajan para evitar que este nuevo fuego, que arde con mucha intensidad, se extienda. Hasta ahora ha quemado unas 12 hectáreas de terreno forestal. En este nuevo foco de fuego trabajan 15 vehículos de agua, 2 vehículos ligeros y una unidad de los GRAF.
La buena noticia es que el fuego de Castellar de la Ribera se ha dado por estabilizado y, en la Terra Alta, el incendio de Corbera d’Ebre ha quedado controlado este mediodía. Esto ha permitido desviar medios hacia los incendios que todavía no están bajo control.
El presidente Pere Aragonès, en una comparecencia con el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha dicho que nos encontramos ante una situación «de excepcionalidad y de extrema dificultad» donde los incendios pueden producir «daños extremos» y ha asegurado que ha sido necesario «priorizar».
