El ex presidente Quim Torra volverá mañana al Parlamento para reunirse con la presidenta de la cámara, Laura Borràs, en el primer aniversario de su inhabilitación por parte del Tribunal Supremo. Borràs lo recibirá en la puerta del Parlamento y lo acompañará al despacho de audiencias, donde le esperarán el presidente del Govern, Pere Aragonès, el vicepresidente, Jordi Puigneró y miembros de la Mesa. Después, Aragonès, Borràs Torra intervendrán desde el despacho de audiencias y harán declaraciones a los medios. Un curioso homenaje que la presidenta se ha sacado de la manga y que busca sacar del ostracismo al ex presidente.
El Tribunal Supremo ratificó hace un año la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que condenaba a un año y medio de inhabilitación y 30.000 euros de multa el presidente de la Generalitat, Quim Torra. La decisión elevó a tres los presidentes catalanes inhabilitados por el poder judicial en cuatro años, después de Artur Mas y Carles Puigdemont.
Fuentes de Presidencia han concretado a Europa Press que se ultima una «recepción» sin tanta pompa como sería un «acto de homenaje» al uso y como pretendía la presidenta del Parlamento, buena amiga de Torra.
Fuentes políticas interpretan que el acto de Torra ha sido metido con calzador en la agenda política de mañana martes. Se ve como un intento de empañar la puesta de largo de Aragonès ante el hemiciclo catalán, en su primer debate de política general y donde tiene previsto presentar su plan de gobierno.
