Josep Costa, el vicepresidente primero del Parlamento catalán durante la anterior legislatura, ha explicado en una entrevista concedida a Catalunya Radio que descartó seguir en la primera línea política como diputado de Junts por el «partidismo» que atribuye al independentismo, y que la situación postelectoral, marcada por el desacuerdo entre ERC y Junts para la formación de un nuevo gobierno, lo ha reafirmado en esta decisión.
Costa se ha mostrado partidario de que el independentismo se ponga en marcha para formar un gobierno con el resultado obtenido el 14-F, pero no de facilitar un gobierno en minoría de ERC, que para él no representa políticamente la mayoría en votos surgida de las últimas elecciones. Y aunque ha manifestado que no quiere que una falta de acuerdo dé lugar a la repetición de las elecciones, ha preferido esta posibilidad a la de formar un gobierno que «entierre definitivamente» el 1-O.
El exvicepresidente del Parlamento de Cataluña ha indicado, en este sentido, que «el país necesita un gobierno y estar bien gestionado, pero si el precio es enterrar definitivamente el 1 de octubre, creo que es peor que unas elecciones». Costa, además, ha defendido que la independencia ya se puede ejecutar a partir del resultado del 1-O, y ha cuestionado que otro referéndum aporte algo.
Asimismo, ha afirmado que el independentismo se encuentra ante un «empate infinito entre estrategias» que lo lleva a la «parálisis», y ha destacado la dificultad de formar un gobierno «si los desacuerdos son tan grandes». En particular, ha proyectado la duda sobre cuál es el punto de acuerdo entre estrategias, «entre esperar a la próxima generación y persistir hasta ser independientes», que, según él, es el problema de fondo.
Costa, que ocupó el 17º lugar de la lista por Barcelona de Junts y podría haber obtenido un escaño tras la renuncia de Carles Puigdemont, cree que ahora «posiblemente puedo ayudar más desde fuera» al independentismo.
