SEAT se ha planteado cierres colectivos de sus plantas que podrían acabar afectando hasta 11.800 trabajadores. La automovilística argumenta la carencia de suministros de semiconductores (chips), un problema cada vez más complicado a escala mundial a raíz del alta demanda de estos componentes en productos electrónicos como pueden ser los teléfonos móviles, los ordenadores o las tablets.
De momentos, SEAT ya ha puesto sobre la mesa un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por las plantas de Martorell y la Zona franca que podría empezar el próximo 30 de enero y tener una duración de seis meses. Este ERTE afectará 400 trabajadores de la planta de Martorell y 150 de la Zona franca.
Empresa y sindicatos ya están negociando como se aplicará estas medidas económicas. Se da la circunstancia que la carencia de semiconductores en el ámbito global ha provocado que la empresa japonesa Honda haya anunciado una reducción de la producción de sus vehículos este mes de enero.
También la empresa alemana Volkswagen ha anunciado que recortará su producción en China, los Estados Unidos y a Europa por la carencia de chips. Los expertos apuntan que la carencia de estos componentes provocará un aumento de sus precios, el que llevará a una posible reducción de la producción de coches y un aumento de sus precios a lo largo de este año.
