El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha abierto este sábado el debate de su investidura en el Congreso de los Diputados defendiendo el acuerdo con ERC: "No se romperá España ni la Constitución, sino el bloqueo en el gobierno elegido democráticamente por los españoles", ha sentenciado en respuesta a las críticas que ha recibido por parte de las formaciones de la derecha y del "bloqueo" que a su entender han hecho PP y Ciutadans.
Salir de los tribunales para sentarse en una mesa de negociación. Esta es la oferta que ha hecho Sánchez para "recomenzar" la relación con Cataluña y "dejar atrás la judicialització del conflicto que tanto de mal ha causado a la sociedad catalana y española".
El debate de investidura ha empezado con turbulencias el día siguiente que la Junta Electoral Central hiciera pública la inhabilitación del presidente Quim Torra y que dictara que el líder de ERC, Oriol Junqueras, no puede hacer de eurodiputado, contradiciendo la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que previamente había indicado el contrario.
"Zancadillas de última hora de la derecha"
El aspirante a revalidar la presidencia ha asegurado que "sí que se puede" forjar un gobierno progresista que es, a su parecer, el que han escogido los ciudadanos. Todo ello, a pesar de las "zancadillas de última hora de la derecha", a quien ha relacionado directamente con la decisión de la JEC de inhabilitar Torra y apartar Junqueras como eurodiputado.
