En el momento en que la sentencia de los presos del procés ya es firme, los condenados dejarán de ser presos preventivos en el plazo de dos meses y tendrán que ser calificados en uno de los tres grados penitenciarios existentes, como avanza TVE. El primer grado que es el de aislamiento se descarta, por lo cual les correspondería el según grado y a pesar de que no es el habitual, sí que sería posible que fueran calificados en tercer grado o semillibertat después de que el Tribunal Supremo haya rechazado impedir que se les aplique este grado antes de haber cumplido la mitad de la pena tal como pedía la Fiscalía, cosa que les permitiría hacer actividades fuera de la prisión muy pronto.
En Cataluña las competencias sobre prisiones están transferidas a la Generalitat y son los centros penitenciarios quienes proponen la calificación y Servicios Penitenciarios quienes deciden. Se puede dar la circunstancia que la Fiscalía se oponga y presente un recurso, y es el juez de vigilancia penitenciaria quien tiene que tomar la decisión. Una decisión que se puede acabar recorriendo ante el Tribunal Supremo.
Una vez completada la cuarta parte de la condena y con un segundo grado, los presos podrían acogerse a beneficios penitenciarios, como por ejemplo derecho a 36 días de permiso ordinario fuera de prisión. Con este escenario tanto el expresidente de la ANC, Jordi Sánchez, como el de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, a mediados de enero ya habrían cumplido la cuarta parte de su condena, porque hace dos años que están en prisión preventiva.
El exvicepresidente del gobierno catalán y líder de ERC, Oriol Junqueras, condenado a 13 años de prisión y en preventiva desde noviembre del2017, podría empezar a disfrutar de estos permisos en febrero de 2021. Una fecha muy próxima a la que podría hacerlo la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, condenada a 11 años y medio y en prisión desde marzo de 2018.
Los exconsejeros Raül Romeva, Jordi Turull y Dolors Bassa, condenados a 12 años también tendrían derecho a permisos ordinarios en esta fecha. El exconsejero de Interior, Joaquim Forn, condenado a 10 años y medio y en prisión desde noviembre de 2017, podría obtener beneficios penitenciarios a partir de junio de 2020, mientras que el exconsejero Josep Rull lo haría a partir de noviembre del mismo año.
Por otro lado, desde el entorno a los condenados se insiste en el hecho que ninguno de ellos pedirá un indulto, y el gobierno central en boca del ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, ha afirmado que "no procede" hablar de indultos. Desde el independentismo también se insiste en el hecho que lo que toca es una "amnistía" al considerar que los líderes del procés han tenido un "juicio político" que hay que desautorizar.
