La proyectada construcción de un nuevo aeropuerto en Andorra es un disparate técnico y económico

Los estudios encargados ubican esta futura infraestructura en la zona de Grau Roig
El aeropuerto de la Seu d'Urgell
El aeropuerto de la Seu d'Urgell

Los empresarios andorranos están angustiados. El modelo de prosperidad de las últimas décadas –basado en la evasión fiscal, el comercio con baja carga impositiva y el contrabando– se está degradando y agotando.

El turismo, que aporta unos ocho millones de visitantes anuales, no es suficiente para mantener el nivel de renta de los 75.000 habitantes que viven en los valles de la Valira. La apertura económica emprendida por el gobierno, con el fin de atraer inversiones extranjeras, no ha dado los resultados esperados, entre otras razones, por la indefinición de las relaciones del país con la Unión Europea, inmersas en una inacabable negociación.

La Cámara de comercio, Industria y Servicios (CCIS) de Andorra considera que la clave para dar un nuevo impulso al país son las infraestructuras de comunicaciones. Desde hace años, se habla de la necesidad de construir un helipuerto, un túnel para enlazar con la red ferroviaria francesa, un tren ligero para comunicar con el aeropuerto de la Seu… Proyectos y más proyectos que han quedado en nada. La última apuesta de la CCIS es la implantación de un nuevo aeropuerto en medio de las montañas del Coprincipat.

Con este objetivo, se han encargado dos estudios preliminares a las consultoras Navblue y CGX. Según estos informes, el nuevo aeropuerto de Andorra debería que tener, como mínimo, una pista de dos kilómetros, para permitir la llegada de aviones como el A320 o el B-737.

El problema es que la complicada orografía del país dificulta enormemente la construcción de una instalación de estas características. La zona que mas se adecuaria está, según los técnicos, la de Grau Roig, a 2.000 metros de altitud.

Pero acto seguido han surgido las críticas a la propuesta formulada por la CCIS. Desde el Colectivo Moretó se señala, sin tapujos, que la construcción del futuro aeropuerto en Grau Roig es un disparate: por las complicadas maniobras de aterrizaje que tendrían que hacer los pilotos, por las adversas condiciones meteorológicas de la zona, por la presencia de hielo en invierno, por el desnivel de la pista…

LEE EL ARTÍCULO COMPLETO EN LA EDICIÓN EN PAPEL DE EL TRIANGLE DE ESTA SEMANA

(Visited 623 times, 1 visits today)
Facebook
Twitter
WhatsApp

avui destaquem

Deja un comentario