Ochenta dotaciones terrestres de los Bomberos de la Generalitat han luchado esta madrugada contra el incendio forestal de la Ribera d'Ebre, que se declaró este miércoles, se encuentra todavía fuera de control y ya ha quemado más de 5.000 hectáreas entre los municipios de Torre de l'Espanyol, Vinebre, la Palma d'Ebre, Flix y Maials. Los Bomberos calculan que el fuego puede llegar a afectar 20.000 hectáreas.
De hecho, aseguran que se trata de uno de los peores incendios de los últimos veinte años y han previsto que las condiciones meteorológicas de este jueves vuelven a ser "de riesgo extremo". Manel Pardo, responsable de Extinción de Incendios, ha lamentado en una entrevista en Catalunya Ràdio que no han podido estabilizar la situación durante la noche, como esperaban.
120 efectivos de la unidad militar de emergencias se han incorporado, a petición de la Generalitat, a las tareas de extinción del fuego esta madrugada, acompañados por nuevo vehículos del batallón de intervención, que tiene su sede en Zaragoza. Este jueves por la mañana, el ejército español ha incorporado 120 efectivos más, de la Unidad Militar de Emergencias (UME), procedentes de Valencia. Además, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha aportado tres hidroaviones a la lucha contra el fuego, que cuenta desde esta noche con maquinaria pesada, han informado los Bomberos.
Hay cinco carreteras cortadas como consecuencia del incendio: la C-12 (entre Maials y Flix), la T-703 (en la Palma d'Ebre), la C-233 (entre Bovera y Flix), la T-714 (Torre de l'Espanyol) y la T-2237 (entre Vinebre y la Palma d'Ebre).
El origen del fuego se encuentra en un punto entre Torre de l'Espanyol y Vinebre. Los Agentes Rurales apuntan como hipótesis que ha empezado con la autocombustión de un estercolero.
