Malestar en la comunidad educativa catalana por la irrupción de los Mossos d'Esquadra en colegios para inspeccionar la retirada de los lazos amarillos y otros símbolos. Los principales sindicatos del sector ya ha hecho público su rechazo a la actuación y han reivindicado la libertad de expresión.
Mientras el presidente Quim Torra situaba la tercera pancarta en el balcó de la Generalitat, los Mossos empezaron a retirar lazos amarillos de edificios públicos, incluidos escuelas e institutos.
Varias familias lo han denunciado en las redes sociales. El consejero de Educación, Josep Bargalló, ha manifestado su apoyo a la comunidad educativa y ha asegurado que la Fiscalía y la Junta Electoral "se están excediendo en sus funciones". El consejero asegura que "se adoptarán medidas" si ha habido irregularidades.
Los Mossos han entrado, por ejemplo, en escuelas de Terrassa, Sabadell o Caldes de Estrac, en el Maresme. Desde el departamento de Interior explican que recibieron la resolución de la Junta Electoral y que todos los departamentos están haciendo lo que corresponde.
Ahora bien, no aclaran si el consejero de Interior, Miquel Buch, ha dado orden a los Mossos. Desde la policía, confirman que están cumpliendo al requerimiento. La Junta Electoral les obliga a sacar cualquier símbolo amarillo o a favor de la liberación de los presos que estén colgados en edificios públicos para garantizar, dicen, la neutralidad durante el periodo electoral.
