El expresidente catalán, Carles Puigdemont, asegura que "la mano del Kremlin" no ha estado detrás de la organización de la consulta independentista del 1 de octubre de 2017. En una entrevista al diario ruso Komsomólskaya Pravda, Puigdemont dice, al respeto, que no quiere "perder el tiempo con estas barbaridades".
De hecho, el expresidente catalán asegura que las informaciones que apuntaron a esta posibilidad son "fake news", es decir noticias falsas y se remite a un informe que hizo el Parlamento británico que defiende que no hubo ninguna injerencia secreta externa en el 1-O. En este contexto, Puigdemont ha asegurado que "la Barcelona independiente será amiga de Moscú".
Carles Puigdemont ha criticado también la falta de apoyo por parte de la Unión Europea a los líderes independentistas que se encuentran en prisión pendientes de juicio a raíz de los hechos vinculados al proceso independentista. Pero también lamenta que la UE no haya apoyado a los otros dirigentes del procés que se encuentran huidos de la justicia española.
Puigdemont insiste en el hecho que mantiene la disponibilidad de diálogo con el gobierno español porque "nunca rechazaremos el diálogo, la negociación y el referéndum como instrumentos para encontrar una solución política permanente en este conflicto".
