Demòcrates, su socio electoral, algunos de cuyos miembros son diputados de ERC en el Parlamento de Cataluña. Figuras principales de esta escisión independentista de Unió como Assumpció Laïlla y Antoni Castellà habían expresado que se podrían replantear la alianza con ERC cuando Joan Tardà sugirió la posibilidad de tender puentes («converger») con los socialistas.
Ahora, ERC y Demòcrates discrepan en cuanto a unas eventuales listas unitarias del independentismo para las elecciones municipales de 2019. El posicionamiento de ERC, refractario a esta fórmula, se consolidó en la conferencia nacional que ha celebrado este fin de semana.
La formación que preside Oriol Junqueras argumenta que los precedentes demuestran que, por separado y cada una con su perfil propio, las fuerzas indepes «maximizan sus resultados». Este lunes, la portavoz de ERC Marta Vilalta ha declarado que harán «lo que mejor sea para maximizar los resultados y conseguir el máximo de ayuntamientos republicanos. Y esto no pasa por homogeneizar el país«.
Mientras tanto, Demòcrates ha evidenciado las diferencias con sus socios al expresar, por boca de Castellà, que «celebramos que ayer la Assemblea Nacional Catalana (ANC) aprobara, en su secretariado, apoyar los mecanismos de primarias abiertas para construir frentes transversales y comunes del independentismo en las #municipales2019«. Castellà considera que «no es el momento del partidismo y sí de la regeneración», y plantea que todos los partidos tienen que estar dispuestos a hacer «renuncias».
Demòcrates fue, de hecho, el partido que más rápidamente se alineó a favor del filósofo Jordi Graupera en cuanto a su propuesta de crear una lista unitaria a partir de unas primarias de todo el independentismo para conquistar electoralmente Barcelona el próximo año.
