El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha rechazado este jueves el referéndum pactado que pide el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y ha el asegurado que mantendrá la posición que el Ejecutivo ha tenido siempre al respeto, además de recalcar de nuevo que en España no hay presos políticos.
Ha sido su forma de evitar apoyar al exministro y embajador, por poco tiempo, de España en EE.UU. Pedro Morenés, pero pronunciarse sobre la polémica, una posición que sólo ha sido alterada por el ministro de Exteriores, José Borrell, al opinar que Morenés «no podía quedar impasible» ante las opiniones de Torra.
Sánchez se ha referido a las palabras del presidente en Washington, en declaraciones a los periodistas a su llegada a la reunión de líderes socialistas europeos previa a la Cumbre de la UE. El jefe del Ejecutivo ha subrayado, ante la petición de un referéndum, que el Gobierno de España ha sido «bastante claro» sobre esta cuestión durante muchos años y su posición «no ha cambiado».
Sánchez ha resaltado que España es un país democrático, con una «democracia asentada y homologable al conjunto de democracias europeas» y ha insistido que «en estos parámetros» se moverá el Ejecutivo.