El responsable de la aplicación efectiva del artículo 155 en Cataluña, el secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, Roberto Bermúdez de Castro, ha afirmado a la Cadena SER que el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, está bloqueando la formación de un nuevo gobierno en Cataluña.
Bermúdez de Castro ha dicho, en referencia a cómo afecta el 155 al día a día de la gestión de la Generalitat, que «una administración aguanta muy sorprendentemente, porque hay mucho funcionario que hace muy bien su papel».
El secretario de Estado ha añadido que «depende de que el interés personal de Puigdemont se acabe de una vez. Cualquier persona que se manifiesta en contra del proceso (independentista) es injuriada. Puigdemont quiere forzar mucho porque haya nuevas elecciones, que entiendo que sería malo para Cataluña».
El responsable de la gestión del 155 ha reconocido que «los primeros días no negaré que había preocupación por cómo iban a reaccionar los funcionarios. No hubo ningún problema, muchísima gente se puso a nuestra disposición», asegurando que su gestión se centra en mantener en funcionamiento las «cuatro patas fundamentales del estado de bienestar, educación, sanidad, servicios sociales y justicia», servicios que «nadie puede decir que funcionen peor».
A pesar de que Bermúdez de Castro se ha mostrado partidario de la necesidad de que hace falta un nuevo gobierno en Cataluña, también ha asegurado que hay la posibilidad de alargar la aplicación del 155 el tiempo que sea necesario.
Roberto Bermúdez de Castro ha apoyado las afirmaciones del ministro de Hacienda, de Cristóbal Montoro, por las cuales el juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, le ha pedido explicaciones. Bermúdez de Castro asegura que «la malversación puede ser dejar un edificio, un local, gastar luz, o entregar una factura que diga servicios postals y que el dinero se utilice para otra cosa. El ministro sabe que desde que hay un control financiero estricto hay un report semanal de la interventora de la Generalitat, que certifica que no ha habido este tipo de gasto. Puede haber falsificación de facturas y otro tipo de malversación, como la cesión o el uso de locales y de elementos públicos».
