Tal como avanzó EL TRIANGLE, hoy se ha hecho público que el imam de Ripoll (Girona), Abdelbaki Es Satty, fue confidente de la seguridad del Estado. Concretamente el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha reconocido que el imam de Ripoll fue confidente de la inteligencia española mientras estuvo ingresado en la prisión de Castelló, donde entró en 2010 hasta 2014, donde estaba encarcelado por un delito de tráfico de drogas.
Las fuentes del CNI que han confirmado este extremo, sin concretar las fechas exactas en que se produjo esta colaboración entre los servicios secretos españoles y el considerado como cerebro de los atentados de Barcelona y Cambrils del pasado 17 de agosto, y que murió en la explosión de la casa de Alcanar (Tarragona) el 16 de agosto. El CNI tampoco ha concretado si la colaboración fue remunerada.
Para el CNI este tipo de contactos son normales y habituales en la lucha antiterrorista, que busca información allá donde la puede encontrar y que en las prisiones hay gente que quiere acabar colaborando, a parte que Es Satty estaba acusado de tráfico de drogas y no de terrorismo.
Es Satty llegó a España en 2002, y su nombre ya había salido en la investigación por los atentados del 11-M en Madrid. El imam de Ripoll también fue investigado en la operación Chacal que perseguía una cédula jihadista en Cataluña en 2005 pero salió sin ninguna imputación.
Nacido en la zona del Rif, zona norte de Marruecos y productora de hachís, Es Satty militaba en el radicalismo jihadista desde muy joven e intentó entrar 121 kilos de hachís en su coche pero fue detenido en la frontera con Ceuta.
Después de pasar cuatro años en la prisión, en 2015 ofreció sus oficios como imam a Vilvoorde (Bélgica) pero después de las investigaciones hechas por los belgas entre las que un policía local preguntó a los Mossos d’Esquadra por sus antecedentes, decidieron negarle la entrada.
Finalmente accedió a la plaza de imam de la mezquita de Ripoll a pesar de tener antecedentes penales cosa que le tenía que haber impedido ejercer.
