Puigdemont está en capilla

Este martes, el presidente de la Generalitat puede declarar la independencia de Cataluña
puigdemont facebook
puigdemont facebook

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, está agotando las últimas horas de las cuales dispone para dar un paso atrás, antes de tener que presentarse ante el pleno del Parlamento de Cataluña y declarar la independencia.

Si se sigue el guion que está previsto, una vez analizados los resultados de la consulta independentista del pasado 1-O el pleno aplicará el artículo 4.4 de la ley del referéndum, suspendida por el Tribunal Constitucional (TC), y que prevé que una vez hecha la consulta y en caso de haber ganado el sí, dos días después de hacerse públicos los resultados se hará una declaración formal de la independencia catalana.

El gobierno de la Generalitat hizo públicos, de manera definitiva, los resultados de la consulta el pasado viernes 6 de octubre, cosa que permite que este martes se proclame la creación de una república catalana con una declaración unilateral de independencia (DUI).

Los datos que dio a conocer el ejecutivo de Puigdemont han cifrado la participación del 1-O en 2.286.217 de votantes, un 43,03% del censo electoral previsto. De estos votantes, 2.044.038 (90,18%) se habrían mostrado a favor de la independencia de Cataluña y 177.547 (7,83%) habrían votado en contra. Otros datos serían los 44.913 votos en blanco (1,98%) y 19.719 votos nulos.

Dentro de la familia independentista, el hecho de que mañana se pueda hacer una DUI que llevaría indefectiblement a la intervención de la Autonomía de Cataluña por parte del Estado con la aplicación del artículo 155 de la Constitución, ha provocado que algunas voces pidan parar la hoja de ruta y busca una salida negociada para la actual situación de enfrentamiento institucional entre Estado y Generalitat.

Esta propuesta de frenazo no gusta ni a la CUP, ni a Demócratas de Cataluña (los escindidos de la antigua Unión Democrática) y tampoco gusta a las dos entidades soberanistas que no tienen representación parlamentaria, la ANC y Òmnium Cultural.

A estas alturas, las presiones para que Puigdemont no declare la independencia le llegan de todas partes. De las más significativas le llegan del sector financiero y empresarial con el goteo de empresas emblemáticas catalanas que han decidido poner su sede administrativa fuera de Cataluña.

El hecho de abrir una negociación con mediadores internacionales cómo ha pedido el gobierno catalán no tiene demasiadas posibilidades de salir adelante a pesar de los ofrecimientos que ya ha habido, como es el caso del grupo The Elders, que cuenta con el expresidente de las naciones Unidas, Kofi Annan.

Para que haya una mediación, esta tiene que estar pedida y acordada por las partes, y el Estado ha dicho que no piensa negociar de ninguna forma una independencia de Cataluña.

(Visited 34 times, 1 visits today)
Facebook
Twitter
WhatsApp

avui destaquem

Deja un comentario