Agentes de la Guardia Civil ha localizado en la sede que la empresa Unipost tiene en Terrassa las notificaciones que la Generalitat de Cataluña quería hacer llegar a los miembros de las mesas del referéndum del 1 de octubre. También han encontrado abundante documentación sobre el censo, publica La Vanguardia.
Unipost, de la familia Raventós (la de Codorniú), se encargó de enviar la propaganda y las notificaciones de las meses de la consulta del 9 de noviembre de 2014. Se trata de la empresa privada que mejor puede asumir la distribución de los envíos necesarios para una votación. Correos, su competidora, comunicó a sus trabajadores que se tenían que abstener de tramitar envíos relacionados con el 1-O, un referéndum cuya convocatoria y ley suspendió cautelarmente el Tribunal Constitucional.
A primera hora de la mañana, la Guardia Civil ha iniciado un registro también en las dependencias de Unipost en l‘Hospitalet de Llobregat. Esta empresa, después de tres años en pérdidas, suspendió pagos y fue a concurso voluntario de acreedores con una deuda de unos 50 millones de euros el pasado mes de julio.
Un grupo de independentistas se ha concentrado ante la sede de Unipost en Terrassa y ha protestado contra la actuación de la Guardia Civil.
