El secretario general de la Presidencia de la Generalitat, Joaquim Nin i Borredà, interrogado este miércoles por la Guardia Civil en el marco de la investigación sobre los preparativos del referéndum, es el primer cargo de la Generalitat señalado por sedición en relación con el proceso independentista.
Nin ha empezado a declarar como testigo este miércoles a las dependencias de la Guardia Civil pero después de varias respuestas potencialmente incriminatorias, revela EFE citando fuentes de la investigación, le han informado de que se le investiga por la presunta comisión de varios delitos, entre ellos el de sedición, que el Código Penal vigente castiga con penas de prisión de 10 a 15 años si lo cometen «personas constituidas en autoridad». Según Nació Digital, que cita fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, Nin ha sido imputado todavía por el juez, quien podría emitir una interlocutoria si considerase que debe investigarlo por sedición.
Según publica El Mundo basándose en fuentes policiales, los investigadores han hallado «indicios de criminalidad» en las gestiones de Nin en cuanto a la votación del 1-O. También ha declarado a las dependencias de la Guardia Civil de la Travessera de Gràcia de Barcelona el director general de Atención Ciudadana, Jordi Graells.
El Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona inició indagaciones sobre los preparativos del referéndum a raíz de las palabras del ex-senador de ERC Santi Vidal durante una conferencia, y este mes de julio requirió al Teatro Nacional de Cataluña, donde Junts pel Sí presentó su propuesta de ley del referéndum, información sobre la celebración de aquel acto. Asimismo, durante las últimas semanas han prestado declaración sobre los preparativos varios funcionarios.
