Alícia Sánchez-Camacho fue una figura clave en el inicio de la llamada operación Cataluña: según una investigación de Público, que revela nuevos audios, ella organizó la grabación de la conversación que mantuvo en 2010 en el restaurante La Camarga con Vicki Álvarez, ex de Jordi Pujol Ferrusola, que le explicó que la familia del expresidente de la Generalitat escondía dinero en Andorra.
En cuanto a Jorge Moragas, jefe de Gabinete de Mariano Rajoy y persona que puso en contacto Sánchez-Camacho con Vicki Álvarez, la misma noticia señala que transmitió al Ministerio del Interior la información obtenida por la líder de los populares catalanes.
De hecho, Público asegura que ha obtenido documentación que demuestra que Interior -entonces dirigido por otro popular catalán, Jorge Fernández Díaz-, ya conocía los movimientos de dinero de los Pujol en Andorra mencionados por Vicki Álvarez antes de que el comisario José Villarejo la interrogara asumiendo la identidad de un periodista de El Mundo. La explicación que aporta esta información es que sólo Sánchez Camacho, a través de Moragas, podía haber informado a Interior.
El digital Público permite escuchar, como apoyo a su exclusiva, audios que asegura que obtuvo Villarejo en una conversación con Vicki Álvarez el 30 de septiembre de 2013. En ese diálogo, los interlocutores dicen que Sánchez-Camacho, ahora vicepresidenta primera del Congreso, denunció falsamente que se hubiera grabado, supuestamente sin ella saberlo, la conversación de La Camarga. Asimismo, Vicki Álvarez pone de manifiesto que cobró por denunciar a los Pujol y se cita al entonces director de la Oficina Antifraude, Daniel de Alfonso, como un participante principal de la operación Cataluña. También se señala que De Alfonso creía que Sánchez-Camacho le había mentido sobre el asunto de La Camarga y que Vicki Álvarez percibía que la líder de los populares la estaba evitando.
