La titular del Juzgado de Primera Instancia núm. 2 de Huesca, ha ordenado al Museo de Arte Nacional de Cataluña (MNAC) que devuelva las pinturas murales de la Sala Capitular del Monasterio de Sixena. La magistrada ha dado un margen de veinte días para que los responsables del museo informen sobre el procedimiento que llevarán a cabo para desmontar las pinturas y trasladarlas a su lugar de origen, así como el nombre de los técnicos responsables del proceso.
En esta misma sentencia, también se pide al gobierno aragonés que en un plazo de diez días informe al juzgado de las condiciones estructurales y climáticas de Sala Capitular.
En este sentido, Neus Munté, consejera de Presidencia, ha asegurado que «el ejecutivo no ha recibido oficialmente ninguna notificación«. Munté ha afirmado que la Generalitat quiere agotar todas las vías legales antes de entregar las obras. «Entendemos que se trata de un nuevo despropósito, no tiene ningún sentido. Estamos en el marco de un procedimiento judicial que no se ha acabado», de modo que «nos mantenemos en la necesidad de continuar defendiendo nuestra posición, porque hay recorrido judicial a explorar«, ha afirmado la consejera.
El pasado 18 de octubre, el consejero de Cultura de la Generalitat, Santi Vila, y el director del MNAC, Pepe Serra, recibieron un aviso del Juzgado número 1 de Huesca, que los advertía sobre posibles «responsabilidades penales«, derivadas del incumplimiento de la sentencia que les obliga a trasladar las obras a Aragón.
