El vicepresidente del Gobierno catalán, Oriol Junqueras, ha amenazado a la CUP de que si no aprueba los presupuestos presentados por el Ejecutivo, los 870 millones de euros destinados a políticas sociales se perderán, con el que «quién acaba pagando el plato es la gente». Junqueras ha hecho estas declaraciones a Catalunya Ràdio, en referencia al enfrentamiento entre Junts pel Sí y la CUP, por la aprobación de los presupuestos de la Generalitat, para el ejercicio de 2016. Junqueras ha asegurado que ya no pueden hacer ninguna otra propuesta a la CUP, para que retiren la enmienda a la totalidad que han presentado a las cuentas del Gobierno catalán.
La semana pasada, fue el mismo presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, quién lanzó la caballería contra la CUP. Puigdemont aprovechó la reunión que mantuvo el pasado viernes, con la Assemblea Nacional de Catalunya, Omnium Cultural y la Asociación de Municipios por la Independencia (también asistió Junqueras), para espetar a la CUP que son unos «destructores» por «rasgar» el proceso independentista, con su rechazo a los presupuestos.
Desde la CUP, el diputado Benet Salellas, no ha cerrado la puerta a que los anticapitalistas acaben dando el sí a las cuentas del Gobierno de Cataluña. Salellas ha afirmado, en declaraciones a RAC-1 , que el documento que se les ha entregado desde el Gobierno con cesiones a sus peticiones, ha provocado «movimientos» y «encuentros» dentro de sus filas, y que esto es positivo.
Hoy mismo, la CUP celebra reuniones territoriales para decidir si darán, o no, apoyo en las cuentas de la Administración catalana para 2016. De las reuniones de hoy tienen que salir mandatos, en forma de votos ponderados, en función de los militantes de cada asamblea territorial. Mañana martes, el consejo político de la CUP tendrá que posicionarse definitivamente.
