El Centro de Seguridad de la Información de Cataluña (Cesicat), actualmente adscrito al Departamento de la Presidencia -antes a Empresa-, espia los correos electrónicos de los funcionarios de la Generalitat según su criterio y sin filtros judiciales o policiales, ha admitido en sede judicial el director, Xavier Gatius.
En su declaración ante el juez, revelada por El Confidencial, Gatius ha explicado que el Cesicat dispone de un equipo de «respuestas de incidentes» que se encarga de estas tareas y que realiza «filtros» -así los llaman puertas adentro- sobre los emails de los funcionarios -aquellos con dirección de correo de la Generalitat- por si son «potencialmente peligrosos». Asimismo ha añadido que «en numerosas ocasiones» se han aplicado «filtros» con relación a direcciones de email vinculadas «a una amenaza concreta» y que los resultados de esos «filtros» se suprimen seis meses después de la desactivación de los mismos, si no los necesita la policía o un juez.
La comparecencia de Gatius en sede judicial se ha producido en el marco de una investigación judicial sobre la intervención de varios correos electrónicos de un asesor del Gobierno catalán.
La sucesora del Cesicat
Por otro lado, según publicó la semana pasada La Vanguardia citando el contenido de un documento elaborado por el Departamento de Economía sobre la ley de medidas fiscales -ley de acompañamiento-, la Generalitat creará una nueva Agencia de Ciberseguridad y la dotará, entre 2016 y 2018, con un presupuesto de 34,7 millones de euros. Se trata de un «incremento respecto a la anterior regulación de 20,2 millones», decía la misma información. Se apunta, además, que esta agencia, considerada una de las estructuras de Estado tantas veces mencionadas durante los últimos años, será la sucesora del Cesicat.
