El documento manuscrito entregado por Jordi Pujol a Andbank en 2001 donde admite que es suyo el dinero a nombre de su primogénito, que está en poder de la Audiencia Nacional, contiene un detalle que no ha pasado desapercibido.
Se trata, revela Español, de la escritura, empleando letras, del número de cuenta que tenía como titular, formalmente, a su hijo Jordi jr. Esta es, según expertos bancarios, una fórmula que usan las entidades ubicadas en paraísos fiscales para que el titular auténtico del dinero pueda efectuar operaciones.
Así pues, el expresidente de la Generalitat, para ordenar al banco movimientos de aquel dinero, no necesitaba ninguna firma: tenía suficiente con la anotación, usando letras, del número de cuenta.
Jordi Pujol Ferrusola, el hijo mayor del expresidente, fue titular de una decena de cuentas bancarias en el Principado de Andorra entre 1990 y 2012, en las que se registraron ingresos que se elevan por encima de los 47 millones de euros, casi 31 millones de los cuales, como mínimo, en metálico, publica El Periódico citando datos remitidos por Andorra a la Audiencia Nacional. Aquellas cuentas se han vaciado durante los últimos años.
Los fiscales llegan a Andorra
En el marco de la acción de la Justicia sobre las cuentas andorranas de Pujol, los fiscales anticorrupción Fernando Bermejo y José Grinda se han desplazado a Andorra para intentar desbloquear la petición de información bancaria.
La información remitida a la Audiencia Nacional por petición del juez Pablo Ruz -instructor predecesor de José de la Mata- ha dado lugar a los registros de esta semana, pero queda pendiente la respuesta a la petición de la titular del Juzgado de Instrucción número 31 de Barcelona, Beatriz Balfagón, que lleva el caso de la fortuna oculta en Andorra por el que están imputados el expresidente Jordi Pujol, Marta Ferrusola y sus hijos Jordi, Marta, Mireia y Pere.
La Fiscalía quiere construir una macrocausa sobre los Pujol en la Audiencia Nacional y, según publica el Diari d’Andorra, pretende que la Fiscalía andorrana se manifieste favorable al envío de unos datos que fueron pedidos hace más de un año, así como trasladar a la batlle (jueza andorrana) la capital importancia de esta información para la instrucción.
