El Gobierno de Andorra, la Asociación de Bancos Andorranos (ABA) y los administradores de la Banca Privada de Andorra (BPA) -nombrados por el INAF- han acordado abrir una línea de crédito para aportar liquidez a las familias y empresas que son clientes de la BPA. El Gobierno del Principado considera que el acuerdo, además de evitar la asfixia económica de los clientes, también permitirá a la entidad separar los activos buenos de los malos, informa El Periòdic d’Andorra.
Según la misma información, el objetivo primordial es conseguir que la entidad, que no presenta problemas de solvencia, recupere sus activos. La previsión es que las oficinas de la BPA abran con normalidad a partir de este lunes, aunque hay preocupación entre los empleados con respecto a sus puestos de trabajo.
El escenario político
Este fin de semana, Toni Martí y los representantes de los grupos parlamentarios que se prevé que se formarán este lunes se reunieron para trabajar en el proyecto de ley de reestructuración y resolución de entidades bancarias.
La formación del nuevo gobierno andorrano, que deberá culminar la nueva legislación, está prevista para este martes, con Martí a la cabeza, y los partidos están dispuestos a agilizarla para resolver, lo antes posible, el asunto de la BPA. Según Diari d’Andorra, sin embargo, el Gobierno y la oposición chocan por el calendario con el que se quiere aprobar la citada ley a marchas forzadas, que no se ha hecho público. La oposición exige más documentación.
Este lunes se constituye el Parlamento andorrano, el Consejo General.
