Cinco días después de que Luis Bárcenas declarara ante el juez que fue él mismo quién entregó en mano a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, 7.500 euros correspondientes a sobresueldos pagados en negro, un extraño suceso ha llevado el pánico al hogar familiar del ex tesorero del PP.
Poco después de las 17h del miércoles, un hombre vestido de cura, que se ha presentado como funcionario de prisiones, ha conseguido acceder a la vivienda de Bárcenas en la calle Príncipe de Vergara, de Madrid, y ha atado y amenazado con una pistola a la mujer del ex tesorero, Rosalía Iglesias, su hijo y una empleada del hogar.
El falso cura y funcionario ha explicado a la familia que venía a hablar de la situación de Bárcenas en la prisión de Soto del Real, por lo cual ha reunido a todos los presentes en la casa en el sofá del comedor. Entonces, ha sacado un arma, les ha atado las manos y les ha exigido que le entregaran un ‘pendrive’ con la supuesta contabilidad B del PP, según fuentes policiales citadas por varios medios madrileños.
El hijo de Bárcenas ha conseguido desatarse y reducir el cura falso cuando ya llevaban cerca de dos horas retenidos. La empleada del hogar ha podido coger la pistola y ha bajado a la calle a pedir ayuda, de forma que un vecino y un empleado de seguridad de la zona han subido a la vivienda y han conseguido retener al asaltante hasta que ha llegado la Policía, que se lo ha llevado detenido.
La Policía ha asegurado que el objetivo del atacante, lejos de amenazar a Bárcenas y a su familia, era conseguir la contabilidad B del PP para demostrar que el «Gobierno miente». También han afirmado que el atacante tiene un trastorno psicológico, cuenta con antecedentes y llevaba una pistola antigua con munición de fogueo.
No obstante, estas explicaciones no han convencido al abogado de Bárcenas, Javier Gómez de Liaño, que ha indicado que en esta causa judicial están pasando «cosas extrañas», como este suceso o la grabación de un vídeo con imágenes del ex tesorero en la prisión de Soto del Real.
