La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha anunciado este jueves que bajará los impuestos locales en la ciudad, aunque ello también comportará una reducción del servicio público que ofrece el ayuntamiento, que finalizará el año con una deuda de más de 7.000 millones de euros.
La reducción de impuestos se aplicará progresivamente, según la alcaldesa. Primero, en 2014, se rebajará un 12% la Tasa de Basuras, lo que comportará una disminución similar del servicio. El consistorio pretende aplicar este descuento gracias al ahorro que espera conseguir en la licitación del nuevo contrato, tras quedar desierto la última vez que salió a concurso.
En 2015 también se aplicará un descuento en el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica, que Botella ha cifrado del 10%. Un año más tarde, en 2016, los habitantes de Madrid pagarán un 5% menos de IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles). Esta última reducción de impuestos se aplicará con un nuevo gobierno, pues las próximas elecciones municipales están previstas para el año 2015.
Estos anuncios se producen dos semanas después de la derrota de Madrid en sus aspiraciones de ser sede olímpica, candidatura a la cual Botella había vinculado su reelección en el cargo. Ahora busca nuevas medidas que le permitan mejorar su imagen entre los electores tras hacer el ridículo con su inglés en el discurso que ofreció en Buenos Aires ante los miembros del COI.
