Un juzgado de Castellón ha sentenciado que la Generalitat Valenciana tiene que pagar, de una sola vez, 120 millones a la empresa Concesiones Aeroportuarias (Conaer) por la construcción del inoperativo aeropuerto de Castellón. El juez estima que la promotora Aerocas, propiedad de la administración autonómica valenciana, tiene que pagar a Conaer por los trabajos de construcción de la infraestructura, que no tiene fecha de apertura todavía.
La Generalitat Valenciana reconoce el derecho de la concesionaria a cobrar por la construcción del aeropuerto de Castellón, pero pretendía financiar el desembolso del coste del aeropuerto durante los 47 años que duraba la concesión. El juez descarta que, una vez resuelto el contrato, una de las partes tenga que cumplir con las obligaciones de pago previstas para el medio siglo siguiente.
La sentencia cierra un conflicto iniciado al 2011, cuando los ejecutivos de Conaer exigieron a la Generalitat nuevas garantías de pago. El Gobierno valenciano se negó y dio el contrato por rescindido. Ahora, el Consejo se ve obligado a realizar un fuerte desembolso en un solo pago por una infraestructura infrautilitzada que, sin que aterrice ni despegue ningún avión, ha dado la vuelta al mundo.
