Después de 124 días en prisión preventiva, los cinco jóvenes de ideas anarquistas detenidos el mes de mayo pasado en Sabadell han quedado en libertad este miércoles. Durante este periodo, a los detenido se les ha aplicado el protocolo establecido para presos terroristas, como el que se utiliza con los miembros de ETA, que comporta aislamiento, dispersión y control de las comunicaciones.
Después de registrar el Ateneo Libertario de Sabadell y la casa de dos de los acusados en Avinyonet del Penedès, el juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, decretó hace cuatro meses prisión provisional incondicional, al atribuir a los jóvenes los delitos de enaltecimiento del terrorismo, contra los derechos fundamentales y las libertades públicas, amenazas, pertenencia a organización y grupos criminales y tráfico de drogas.
Uno de los abogados que trae el caso, Jaume Asens, ha indicado que la justificación de la acusación de terrorismo está tergiversada «puesto que un bidón de gasolina encontrado en un garaje no tendría que ser interpretado en esta clave». La acusación de tráfico de drogas viene dada porque también se localizaron algunas sustancias estupefacientes.
Según la versión de los Mossos, los detenidos utilizaban las redes sociales para enaltecer organizaciones armadas y hacer llamamientos a la violencia urbana en los días anteriores a movilizaciones ciudadanas.
