Las autoridades del Principado de Andorra han entregado a España al empresario Pablo Olona, vinculado con los negocios de Jordi Pujol Ferrusola en Panamá y también con Joan Piqué Vidal, abogado de Jordi Pujol en el caso Banca Catalana que fue condenado por el caso Pascual Estevill y por construir una estructura societaria al servicio del cártel de Sinaloa (caso Tacos), y con Javier de la Rosa, el financiero condenado por el caso KIO, publica el digital andorrano Altaveu.
Olona, según esta información, se escondía en el país de los Pirineos para no tener que responder por un delito de insolvencia punible ante las autoridades españolas, que lo vuelven a tener bajo su custodia desde el mediodía de este miércoles. Su detención se produjo el pasado 3 de marzo, después de que la Interpol, desde Madrid, alertara que lo estaba buscando porque no había vuelto a la cárcel donde cumplía condena.
Este empresario ha manejado varias sociedades en el país centroamericano durante las últimas décadas. Estaría relacionado, apunta Altaveu, con la operación de Puerto Verde Panamá Atlántico, descrita por el broker François de Seroux a la UDEF. Según aseguró Seroux, Jordi Pujol Ferrusola y Jordi Puig Godes (hermano del ex consejero Felip Puig) impulsaron una millonaria captación de capital procedente de empresarios e inversores catalanes para obtener una gran obra portuaria en la entrada atlántica del Canal de Panamá, pero detrás, supuestamente, se escondía una gigantesca maniobra de blanqueo.
Aquella operación, fuese como fuese, no llegó a buen puerto, pero está bajo la lupa de los investigadores del caso Pujol. Según la confesión de Seroux, Piqué Vidal era una figura clave: apunta que Jordi Pujol Ferrusola y Jordi Puig pretendían beneficiarse de los contactos mexicanos de este abogado penalista para emplear la infraestructura financiera de un cártel mexicano de la droga en el blanqueo de capitales.
Los vínculos de Olona con Piqué Vidal y De la Rosa se pusieron de manifiesto con el escándalo de Grand Tibidabo. El empresario declaró como testigo, mientras que tanto el abogado como el financiero estaban imputados. Según Altaveu, Olona se embolsó 25 millones de pesetas procedentes de Circulo Novatio, una sociedad controlada por De la Rosa y relacionada con Grand Tibidabo.
