Barcelona ha culminado su participación como ciudad invitada a la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara con una edición calificada de «éxito» por el Ayuntamiento de Barcelona, superando los 950.000 visitantes y convirtiéndose en la mayor operación de proyección internacional de la cultura catalana impulsada hasta ahora con el apoyo de la Generalitat. La comisaria Anna Guitart destaca una recepción «muy positiva», con actos llenos y un fuerte impacto por parte de autores y artistas, desde el protagonismo de Joan Manuel Serrat hasta el homenaje a Montserrat Roig, que agotó libros tras la primera sesión. El pabellón barcelonés, inspirado en plazas emblemáticas, atrajo a miles de personas y vendió unas 5.300 obras de las 10.000 expuestas.
La participación de este año, según Guitart, es «una semilla» para continuar fortaleciendo los vínculos culturales entre Barcelona y Guadalajara más allá de la invitación de honor. La presencia institucional —con figuras como Jaume Collboni, Salvador Illa, Ernest Urtasun y Yolanda Díaz— ha reforzado el posicionamiento cultural catalán en Latinoamérica. La librería del pabellón fue uno de los puntos más concurridos, con un notable interés por el catalán, tanto en obra original como en traducciones y materiales de aprendizaje, según explica Melissa Navarro, responsable operativa del espacio.
La FIL ha reunido 2.790 sellos editoriales de 64 países, más de 450.000 títulos y personalidades como Chimamanda Ngozi Adichie, Richard Gere y Venki Ramakrishnan en más de 3.000 actividades. La directora Marisol Schulz ha expresado «la convicción de que se ha hecho un gran trabajo» y ya prepara la 40ª edición, que se celebrará del 28 de noviembre al 6 de diciembre de 2026, con Italia como país invitado.
















