El Obispado de Vic se ha decidido finalmente a pararle los pies al sacerdote Gustavo Lombardo de Manresa que ha indignado a la ciudad con sus proclamas ultraderechistas desde la rectoría de la parroquia de la Verge de la Mercè. Tras las quejas de varios medios de comunicación, incluido EL TRIANGLE, y el propio alcalde de Manresa, Marc Aloy, el Obispado ha acabado llamando al orden a Lombardo.
El vicario general, Josep Maria Riba, ha declarado a Regió 7 que «el Obispado ha hecho las acciones oportunas cuando pasan cosas de estas. Se ha hablado con el interesado y con su responsable religioso». Nacido en la Argentina, Lombardo tiene 45 años, se presenta como misionero y forma parte del Instituto del Verbo Encarnado, una congregación fundada por Carlos Miguel Buela, un sacerdote argentino ultraortodoxo y de extrema derecha destituido por abusar sexualmente de seminaristas. Asegura que «el comunismo, si pudiera, nos mataría como en el 36», que la agenda LGTBI está totalmente en contra de Dios, que el aborto es cosa del demonio o que «Dios hizo a la mujer como una ayuda adecuada al hombre». En febrero de 2023, organizó un rosario sólo para hombres que debían arrodillarse en la plaza de Valldaura, frente a su parroquia, con el objetivo de «recuperar la masculinidad».
