La ciudad de Barcelona ha atendido a 299.000 personas en cuatro años con su plan para desarrollar políticas de empleo de calidad, el Acuerdo Barcelona para el Empleo de Calidad (ABOQ). Esta estrategia ha llegado al ecuador de su trayectoria sumando 291 actuaciones, unas 70 de media cada año, y 191 millones de euros de presupuestos ejecutado desde 2021 a junio de 2024.
La ABOQ, con la que Barcelona se pretende posicionar como un referente en el impulso a la equidad y la calidad del mercado laboral, nació del consenso entre Barcelona Activa, el consistorio, el Servicio de Empleo de Cataluña (SOC) y el área metropolitana, y ha contado con la participación hasta ahora de 74 entidades.
Este acuerdo, que incluye apoyo en forma de asesoramiento, acompañamiento, formación, subvenciones y colaboración con agentes sociales y económicos, ha establecido 40 indicadores clave sobre la base de diez factores de referencia.
El decálogo que define el empleo de calidad tiene en cuenta la adecuación de la estabilidad laboral y el salario a la vida de la ciudad, la flexibilidad, la formación para mejorar competencias y la organización, y la conciliación de las vertientes laboral y personal, entre otras cuestiones.
Según difunde el Ayuntamiento de Barcelona, una gobernanza robusta basada en datos ha permitido intensificar el trabajo para asistir a los mayores de 45 años y a los jóvenes que han abandonado los estudios, dos colectivos más vulnerables del mercado laboral.
De hecho, de la primera mitad del periodo de vigencia de la ABOQ, el consistorio ha destacado el nuevo Plan de Empleo Juvenil de Calidad 2024-2030, concebido para incrementar el empleo de los ciudadanos jóvenes, de entre 15 y 29 años, impulsando la orientación vocacional, la cualificación profesional, la diversidad de talentos y la iniciativa emprendedora.
