Después de ser expulsada del grupo parlamentario de Junts x Catalunya (JxCat), la diputada leridana Cristina Casol no piensa tirar la toalla. Ha decidido mantener el escaño y pasar al grupo de no adscritos, donde coincidirá con el exdiputado de Vox Antonio Gallego. A la vez, ha procedido a tramitar su baja del partido y a redoblar su apoyo a la también diputada de JxCat Aurora Madaula, actualmente de baja por enfermedad.
Cristina Casol y Aurora Madaula no solo pertenecen al grupo afín a Laura Borràs, la presidenta de JxCat. Ambas han denunciado el “machismo”, el ”acoso por razón de género” y el “trato vejatorio” que han recibido por parte del presidente del grupo parlamentario, Albert Batet, y otros diputados del sector turullista del partido.
Un total de 26 de los 32 diputados de JxCat en el Parlament firmaron una carta donde reclamaban la expulsión de Cristina Casol y en la reunión de la ejecutiva del partido, la propuesta fue ratificada con 29 votos a favor y 8 en contra, entre los cuales el de Laura Borràs. Ahora, la diputada leridana piensa dar un paso más y denunciar a JxCat a los tribunales de justicia por el mobbing que ha sufrido, con episodios de escarnio, aislamiento, gritos, falsos rumores, gestos groseros, comentarios peyorativos…