Raúl Incertis, el anestesista de Médicos Sin Fronteras evacuado de Gaza, ha pedido en un vídeo difundido por la organización que se acabe «ya» con el «castigo colectivo, cruel y desmedido» que Israel está impartiendo en la franja. «Estamos en un lugar seguro, pero nuestros corazones, mentes y almas se han quedado con nuestros compañeros, con los palestinos, en esta jaula inhumana en que se ha convertido la Franja de Gaza», afirma Incertis.
El anestesista relata un panorama muy crudo con una población sin alimentos ni bebida y con enfermedades infecciosas por culpa de las condiciones higiénicas. También con bombardeos próximos en zonas habilitadas por la ONU como «zonas desmilitarizadas», «matando a la gente que estaba fuera del refugio».
Incertis también ha sido testigo de la desesperación de los refugiados en este lugar y de cómo «se abalanzaban» sobre los camiones de «la poca» ayuda humanitaria «que queda» para conseguir «un saco de harina». Relata, además, las pérdidas de familiares de sus compañeros que se han quedado en Gaza. En un caso, uno de ellos ha perdido «en un único bombardeo a 23 miembros de su familia».
Indica que la situación de los hospitales es «insostenible», con más de la mitad «inoperativos» y material «insuficiente» para «poder operar ni para hacer operaciones en condiciones de esterilidad». «Se han desconectado pacientes de ventilación mecánica. Las incubadoras corren peligro, es decir, esto no hay quién lo aguante», añade.
