El diputado de Junts Lluís Puig no podrá votar este viernes en el pleno para escoger el relevo de Laura Borràs en la presidencia del Parlamento catalán porque, según han informado fuentes de la Mesa, la votación es a través de voto secreto, introduciendo una papeleta en una urna. Desde hace semanas, Puig vota telemáticamente en los plenos de la cámara, una fórmula que se acordó para superar la sentencia del Tribunal Constitucional que anula su delegación de voto.
Según el artículo 44 apartado 1 del reglamento del Parlament, para escoger la presidencia de la cámara cada diputado tiene que escribir un solo nombre en una papeleta y sale escogido quién tiene mayoría absoluta. Si no se logra esta mayoría, el reglamento establece que se tiene que repetir la elección entre los dos diputados que se hayan acercado más a la mayoría y sale elegido quién obtiene más número de votos. «En caso de paridad, se tiene que repetir la elección, y, si la paridad persiste después de cuatro votaciones, se considera elegido el candidato del grupo parlamentario con más diputados», añade el reglamento.
La Mesa del Parlament prevé que este viernes ya puedan votar dos nuevos diputados: Antoni Castellà de Junts, en sustitución de Borràs, y Neus Ramonet de ERC, en sustitución de Antoni Flores, que murió repentinamente hace unos días. Tanto Castellà como Ramonet tienen que presentar la documentación necesaria al Parlamento para poder tener el acta de diputado. El pleno empezará a las 12 horas con un único punto del orden del día y está previsto que se alargue durante una hora y media. Una vez escogido el nuevo presidente o presidenta de la cámara, este intervendrá dentro del hemiciclo.