El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, vincula la avería de la línea R2 Sur a la carencia de inversiones de los diferentes gobiernos españoles, por lo que reclama una vez más el traspaso de Rodalies a la Generalitat.
Aragonès ha visitado este lunes la estación de Gavà (Baix Llobregat), epicentro de la incidencia que ha dejado fuera de servicio el sistema de comunicaciones en línea. Lo ha hecho junto con el conseller de Territori, Julio Fernández, y el director general de Conservació i Manteniment de Adif, Ángel Contreras.
«Este incidente se ha producido hace una semana, y supone un caos en el sistema de Rodalies que ocurre un día sí, un día también», ha reprochado. En este sentido, ha destacado que una visita como la suya con el conseller de Territori no debería haber sido la única de carácter político: «Lamento que por ahora la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, no lo haya hecho, cuando lo tiene al lado mismo de su casa».
«Anomalías como ésta hace que ciudadanos de todo el país se sientan tratados como ciudadanos de segunda», ha añadido, en este caso concreto los de las comarcas del Baix Llobregat, Garraf, Baix Penedès y Barcelonès.
Este tipo de averías, ha dicho Aragonès, son consecuencia de decisiones de carácter político: «Llevamos décadas de carencia de inversión, no es una prioridad política de los gobiernos españoles, ni los de antes ni el de ahora», ha señalado.
Es por este motivo que pone de manifiesto la necesidad de que se pueda gestionar el servicio de Rodalies desde Cataluña, una función por la que el Govern insiste una y otra vez en el gobierno estatal. «Nos hacemos nuestra la voz que hay en Cataluña para asumir todas las responsabilidades en el ámbito ferroviario, estamos convencidos de que por poco que se haga la gestión desde aquí, se hará mejor que la que se hace ahora», ha añadido.















