El diseño de la campaña electoral para estas elecciones españolas del 28 de abril ha tenido un elemento común en casi todos los grandes partidos que se presentan: el asalto al área metropolitana de Barcelona. Siempre ha tenido un peso especial, sobre todo en algunos partidos, pero al analizar las campañas de todas las formaciones para el 28-A, sorprende que casi todos dan a la zona metropolitana una importancia tan grande que prácticamente abandonan el resto del territorio.
Cs, el PSC, el PP, los comunes e incluso ERC priorizan tanto las grandes ciudades del entorno de Barcelona y su voto, que excepto los típicos mítines de gran formato en Girona, Tarragona y Lleida, prácticamente no han programado campaña de alta intensidad en el territorio más rural y de interior. Sólo JxCat parece querer mantener el modelo de campaña clásico de los partidos catalanistas, dando mucho peso a un voto, el menos metropolitano, que siempre había tenido Convergència. Los politólogos y políticos que diseñan las campañas, pero, parecen coincidir que esta vez el buen resultado se juega en las zonas más pobladas de Cataluña.