El vicepresidente cesado de la Generalitat, Oriol Junqueras, los siete ex consejeros y los Jordis encarcelados por orden de la juez de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, han seguido este viernes la ‘vía Forcadell’ ante el juez del Tribunal Supremo y han acatado el artículo 155 de la Constitución por el cual fueron cesados de sus cargos después de declarar unilateralmente la independencia de Cataluña.
A pesar de esto, el fiscal mantiene su petición de prisión provisional sin fianza para todos ellos porque considera que no han cambiado las circunstancias, puesto que según el Ministerio Público hay riesgo de fuga y reiteración delictiva. El juez decidirá el lunes si permite la excarcelación de los diez encausados, tal como hizo con los miembros de la Mesa.
Según fuentes presentes en el interrogatorio, todos ellos, con más o menos contundencia, se han comprometido a no salirse del marco constitucional para conseguir su propósito independentista y que van a hacer política dentro de las vías legales.
Después de que el pasado viernes, el magistrado Pablo Llarena asumiera la parte de la investigación contra el Gobierno cesado y los presidentes de las asociaciones llevada inicialmente por la Audiencia Nacional, todos ellos solicitaron inmediatamente su puesta en libertad.
El magistrado del Supremo había sido menos restrictivo con los miembros de Mesa del Parlamento, a quién dejó en libertad excepto a la presidenta, Carme Forcadell, a quién impuso una fianza de 150.000 euros, que pagó en 24 horas.
A la vista de la petición, el instructor los ha interrogado este viernes a pesar de que ya les ha avanzado que la decisión no lo adoptará hasta el próximo lunes, día que empieza la campaña para las elecciones del 21 de diciembre, en la cual la mayoría de los encarcelados se presentan como candidatos por diferentes listas.
