La oposición expresada públicamente por la secretaria general de ERC, Marta Rovira, contra la negativa del Gobierno de la Generalitat a acusar a Convergència por el caso Palau ha claudicado en la reunión del Consejo Ejecutivo de este martes.
«El Departamento de Cultura se lo tendría que repensar», había expresado Rovira en Twitter, manifestando que «ERC piensa que se tiene que ir hasta el final». Pero el Gobierno de la Generalitat, que los republicanos comparten con el PDEcat, ha anunciado que su posición «unánime» es evitar que el Palau de la Música inculpe ahora al partido antecesor del PDEcat. «El Gobierno es único y solidario y toma las decisiones conjuntamente», había replicado a Rovira la coordinadora del PDECat, Marta Pascal.
El pasado viernes, los convergentes del Gobierno de la Generalitat hicieron valer su mayoría en el Consorcio del Palau de la Música, de forma que se descartó que CDC fuera acusada desde esta institución de financiarse irregularmente cobrando comisiones de Ferrovial, como había planteado el Ayuntamiento de Barcelona.
El posicionamiento del Gobierno catalán lo ha expuesto la portavoz Neus Munté, que hace un mes había desautorizado a la propia Rovira diciendo que de los planes del Gobierno catalán informa el Gobierno catalán. La dirigente de ERC había dicho entonces que el Gobierno de la Generalitat estudiaba crear una bolsa de parados que asumieran trabajos durante la celebración del referéndum.
La carta de Colau
Además de la postura expresada por la secretaria general de ERC sobre el caso Palau, el Gobierno que preside Carles Puigdemont había recibido la presión del Ayuntamiento de Barcelona para cambiar de parecer. En concreto, Ada Colau le había remitido una carta para que reconsiderara su postura y convocara nuevamente al Consorcio. Munté considera que Colau no ha sido «ni transparente ni honesta», ya que, según asegura, se enteraron de la petición de la alcaldesa de Barcelona «a través de un medio de comunicación».
Por otro lado, la portavoz del Gobierno catalán ha anunciado que «nos opondremos a la rebaja de penas que pide el fiscal, haremos todo lo necesario para recuperar el dinero del Palau de la Música». Pero hasta que no se conozca la sentencia, ha dicho, no decidirán si actúan contra CDC.
Por su parte, el portavoz de ERC Sergi Sabrià, contrariado porque los consejeros de su partido ignoraban la posición que iba a defender el Gobierno en el Consorcio de Palau, había expresado que si se llega a plantear una moción parlamentaria, ERC votará a favor de acusar CDC. Lluís Rabell, de Catalunya Sí Que Es Pot, ha anunciado este lunes que su grupo parlamentario presentará una propuesta de resolución para instar al Gobierno de la Generalitat «a recuperar la acusación particular». «ERC tendrá ocasión de votar con nosotros», ha comunicado.
Rizando el rizo, el consejero de Cultura, Santi Vila, había adjudicado a la jefa del Gabinete Jurídico de la Generalitat la decisión de no presentar acusación contra CDC en el caso Palau. Su nombre es Margarida Gil Domènech, y es la esposa de un compañero de partido y de Gobierno de Vila: el consejero de Interior, Jordi Jané.
